El Ayuntamiento de Santander ha adjudicado a Ascán las obras de reordenación del tráfico en la plaza de Numancia con un presupuesto de 145.046 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses.
Así lo anunció el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, quien informó que la obra comenzará este mes y que responde a una nueva iniciativa municipal encaminada a mejorar la calidad de vida de los santanderinos, particularmente en lo que tiene que ver con la movilidad, fruto de un trabajo exhaustivo de los servicios técnicos, en colaboración con la Universidad de Cantabria, proyecto que cuenta con el respaldo de las asociaciones de vecinos de la zona.
La obra consiste en prolongar el carril que se incorpora desde la calle San Fernando a través de la propia plaza de Numancia, para evitar que el tráfico se llegue al punto “conflictivo” que se produce en la calle Vargas, con lo que se consigue descongestionar sustancialmente este nudo de la plaza.
Otra medida que contempla esta solución es la de obligar a los vehículos que llegan por la calle San Luis a dirigirse hacia la calle Magallanes, para evitar que tengan que cruzarse con el tráfico dominante que proviene de la plaza, con lo que también se gana en fluidez. Asimismo, se instalarán cinco semáforos para regular los dos pasos de peatones que cruzan la plaza, con lo que no sólo se mejora la circulación de vehículos, sino que también se gana en seguridad para los peatones. Además, la obra se complementa con otra medida disuasoria: la colocación de barandillas en determinados puntos de la plaza para evitar que los peatones crucen por lugares inadecuados.
Según los estudios realizados por la Universidad de Cantabria con diferentes soluciones para este espacio, la que propone este proyecto reduciría la densidad del tráfico en un 61 por ciento y el número de paradas en un 48 por ciento. Por su parte, las demoras desde que un vehículo quiere entrar en la plaza hasta que consigue salir, disminuirían en un 67 por ciento.