Las obras de remodelación de la plaza de Numancia, que el Ayuntamiento de Santander ha adjudicado a Ascán, comenzaron el miércoles con un presupuesto de 145.000 euros y un plazo de ejecución de cuatro meses. Su objetivo es mejorar la fluidez del tráfico y aportar seguridad al elevado número de peatones que discurren por la zona.
El alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, y el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz, pusieron la primera piedra de la actuación y presentaron a vecinos y asociaciones del entorno esta remodelación, diseñada por el Departamento de Transportes de la Universidad de Cantabria tras estudiar más de una decena de alternativas.
La actuación consiste en la construcción de un ramal para los vehículos que acceden desde San Fernando a la plaza de Numancia, de forma que éstos entren directamente en el centro de la plaza en lugar de girar a la derecha hacia a la calle Vargas, evitando el punto conflictivo. Por otra parte, los vehículos que llegan desde la calle San Luis no se incorporarán de forma directa a San Fernando sino que deberán girar a la derecha, discurrir hasta Magallanes-Floranes y volver hacia San Fernando, lo que permitirá reducir el tráfico en el cruce central de la plaza.
Al mismo tiempo que se hacen estas dos modificaciones del tráfico rodado, se instalarán cinco conjuntos semafóricos para regular el cruce de peatones en esta zona y se pondrán barandillas para evitar que se cruce por zonas no autorizadas.
De la Serna ha detallado que estas obras mejorarán en un 67 por ciento la fluidez del tráfico, según indican los estudios de la UC, y evitarán retenciones de vehículos en los puntos de la plaza en los que en estos momentos hay problemas. El alcalde también explicó que esta actuación forma parte de un proyecto de transformación integral mucho más ambicioso que incluye las escaleras mecánicas que conectarán Numancia con General Dávila y el Centro Cívico de Numancia, una inversión municipal de más de tres millones de euros.